Nahuatl

La lengua náhuatl

  • Tochin in metztic – poema “El conejo en la Luna”

    Poema

    Tochin in mētstikEl conejo en la luna
    Youaltotomej
    inchan omankej;
    senka kiauia youalnepantla.
    Los pájaros de la noche
    Se quedaron en su casa;
    Mucho llovía a la mitad de la noche.
    In ijkuak oyajkej in tlilmixtli,
    youaltotomej patlantinemij,
    aso kittayaj tochin in metstik.
    Nejuatl uel onikimittak
    in youaltotomej
    iuan tochin in mētstik.
    Cuando las nubes negras se fueron,
    Los pájaros estuvieron revoloteando,
    Tal vez veían al conejo en la Luna.
    Yo pude contemplar
    A los pájaros de la noche
    Y también al conejo en la Luna.

    tochin: conejo

    youaltotome: pájaros nocturnos

    yohual-: noche
    toto-: pájaro
    -me: plural

    inchan: su casa (de ellos)

    omankej: se quedaron

    senka: mucho

    kiauia: llovía

    youalnepantla: en medio de la noche

    in ijkuak: cuando

    oyajkej: se fueron

    in tlilmixtli: las nubes negras

    patlantinemij: andar volando

    aso: tal vez

    kittayaj: veían

    in mētstik: adentro de la Luna

    nejuatl: yo

    uel: se puede

    onikimittak: le vi

    iuan: y

  • Poemas de Nezahualcóyotl en nahuatl y español

    Acolmiztli Nezahualcoyotl (1429–1472) fue un rey de origen acolhua que, tras el asesinato de su padre y educarse como Mexica, formó parte de la Triple Alianza y recuperó bélicamente el trono de Texcoco en 1431. Su reinado se distinguió por su sabiduría y humanismo: restringió los sacrificios, importó el código civil mexica, auspició artistas y diseñó jardines y canales. Además, creó la poesía indígena prehispánica más célebre del actual territorio mexicano.

    Acolmiztli quiere decir “brazo de puma” (acol- es ‘brazo u hombro’, mientras que miztli se refiere a felinos grandes), y Nezahualcoyotl quiere decir “coyote en ayuno” (nezahual– quiere decir ‘ayuno’ -del verbo zahua-,  y se representa en su glifo con un collar, y coyotl es ‘coyote’, que en su glifo se anota con la cabeza del animal y con un hoyo en el collar para indicar que se lee como coyo-, ‘agujero’). Es incorrecto escribir “Netzahualcoyotl” con T, aunque mucha gente lo escribe así equivocadamente por ultracorreción al sentir que así suena más indígena y por costumbre.

    “Ycuic neçahualcoyotzin”. Detalle de una página de Cantares Mexicanos, donde la ç se pronuncia como la “s” mexicana y se escribe en la ortografía clásica con Z.

    Sólo existen 36 poemas que con certeza (según José Luis Martínez) son poemas de Nezahualcoyotl: 10 se encuentran en el manuscrito Cantares Mexicanos, otros 24 en el manuscrito  Romances de los señores de la Nueva España y 2 más en Historia Chichimeca. El famoso poema de “Amo el canto del Cenzontle, pájaro de cuatrocientas voces” que aparece en el billete de 100 pesos NO fue creado por Nezahualcoyotl [fuente], pues utiliza un estilo y lenguaje posthispánico, como puede apreciarse a continuación:

    Nejuātl niktlasojtla
    in sentsontōtōtl ikuīkau,
    nejuātl niktlasojtla
    in chalchiuitl itlapālis

    īuān in auiakmej xōchimej;
    san ok senka noikniutsin in tlākatl,
    Nejuātl niktlasojtla
    Amo el canto del cenzontle,
    pájaro de cuatrocientas voces,
    amo el color del jade
    y el enervante perfume de las flores,
    pero más amo a mi hermano: el hombre.

    A. Cantares Mexicanos

    A.1 Memorias de los reyes
    A.2 Dolor y amistad
    A.3 Angustia ante la muerte
    A.4 El árbol florido A.4.1 Nikitoa (Yo lo pregunto)
    A.5 Poemas de Yoyontzin
    A.6 Poema de rememoración de héroes A.6.1 Nitlayocoya (Estoy triste)
    A.7 Deseo de persistencia
    A.8 Icuic in Acolhuacan in Nezahualcoyottzin (Canto de Nezahualcóyotl de Acolhuacan)
    A.9 En buen tiempo vinimos a vivir
    A.10 ¿Can nelpa tonyazque? (¿A dónde iremos?)

    B. Romances de los señores de la Nueva España

    B.1 Poneos en pie / Poneaos de pie
    B.2 El poder grande del criador / Nos enloquece el Dador de la Vida
    B.3 Deleitaos / Alegraos
    B.4 Nos ataviamos, nos enriquecemos 2.4.1 Lo comprende mi corazón
    B.5 A lo divino gentílico / ¿Eres tú verdadero (tienes raíz)?
    B.6 Sólo él / Solamente él
    B.7 Es un puro jade
    B.8 Ay de mí
    B.9 Canto de la huida
    B.10 Comienzo a cantar
    B.11 Pongo enhiesto mi tambor
    B.12 Con flores negras veteadas de oro
    B.13 Tú, ave azul, tú lúcida gaucamaya
    B.14 Cual joyeles abren sus capullos
    B.15 Nos atormentamos
    B.16 Ay, solo me debo ir
    B.17 Como una pintura nos iremos borrando
    B.18 Esmeraldas, oro…!
    B.19 Ponte en pie, percute tu atabal
    B.20 Canto de primavera
    B.21 Comienza ya…
    B.22 Los cantos son nuestro atavío
    B.23 Mientras que con escudos…
    B.24 Esmeraldas, turquesas

    C. Historia Chichimeca

    C.1 Ido que seas de esta presente vida
    C.2 En tal año como este

    Los poemas más celebres de Nezahualcóyotl

    A continuación están los poemas más populares de Nezahualcoyotl en sus traducciones más populares también (las de León Portilla).

    No acabarán mis flores

    Ajtlamis noxochiu
    ajtlamis nokuik
    in nokonyaewa / san nikuikanitl
    Xexeliuij moyauaj
    kosauia xochitl:
    ye on kalakilo
    sakuan kalijtik.
    No acabarán mis flores,
    no cesarán mis cantos.
    Yo cantor los elevo,
    se reparten, se esparcen.
    Aun cuando las flores / se marchitan y amarillecen,
    serán llevadas allá
    al interior de la casa / del ave de plumas de oro.

    Lo comprende mi corazón

    Kin ok ka tlamati noyollo:
    yeua nikkaki in kuikatl,
    nikitta in xochitli:
    ¡Ma ka in kuetlauiya!
    Por fin lo comprende mi corazón:
    escucho un canto,
    contemplo una flor:
    ¡Ojalá no se marchiten!

    Yo lo pregunto

    Nikijtoa ni-Nesaualkoyotl:
    ¿Kuix ok neli nemoua in tlaltikpak?
    An nochipa tlaltikpak:
    san achika ya nikan.
    Tel ka chalchiuitl no xamani,
    no teokuitlatl in tlapani,
    no ketsali posteki.
    An nochipa tlaltikpak:
    san achika ye nikan.
    Yo Nezahualcóyotl lo pregunto:
    ¿Acaso deveras se vive con raíz en la tierra?
    No para siempre en la tierra:
    sólo un poco aquí.
    Aunque sea de jade se quiebra,
    aunque sea de oro se rompe,
    aunque sea plumaje de quetzal se desgarra.
    No para siempre en la tierra:
    sólo un poco aquí.

    Estoy embriagado

    Niuinti, nichoka, niknotlamati,
    nikmati, nikijtoa,
    nikilnamiki:
    Ma ka aik nimiki
    ma ka aik nipoliui.

    In kan ajmikoua,
    in kan on tepetiua,
    in ma onkan niau…
    Ma ka aik nimiki,
    ma ka aik nipoliui.
    Estoy embriagado, lloro, me aflijo
    pienso, digo,
    en mi interior lo encuentro:
    si yo nunca muriera,
    si nunca desapareciera.

    Allá donde no hay muerte
    allá donde ella es conquistada,
    que allá vaya yo…
    Si yo nunca muriera,
    si nunca desapareciera.

    Soy rico

    Ye nonnokuiltonowa,
    on nitepiltsin, Nesaualkoyotl.

    Niknechiko koskatl,
    in ketalin patlauak,
    ye nonikiximatin chalchiuitl,
    ¡in tepilwan!
    Ixko nontlatlachia,
    nepapan kautlin, oselotl,
    ye nonikiximatin chalchiuitl,
    ya in makistli…
    Soy rico,
    yo, el señor Nezahualcóyotl.

    Reúno el collar,
    los anchos plumajes de quetzal,
    por experiencia conozco los jades,
    ¡son los príncipes amigos!
    Me fijo en sus rostros,
    por todas partes águilas y tigres,
    por experiencia conozco los jades,
    las ajorcas preciosas…

    Estoy triste

    Nitlayokoya, niknotlamatiya
    san, nitepiltsin Nesaualkoyotl
    xochitika ye iuan kuikatika
    nikimilnamiki tepiluan,
    ain oyake,
    yejua Tesosomoktsin,
    o yejuan Kuajkuajtsin.
    Estoy triste, me aflijo,
    yo el señor Nezahualcoyotl
    con flores y con cantos,
    recuerdo a los principes
    a los que se fueron
    a Tezozomoctzin,
    a Cuacuahtzin.
    Ok nelin nemouan,
    kenonamikan.
    ¡Maya nikintoka in intepiluan,
    maya nikimonitkili toxochiw!
    Ma ik itech nonasi,
    yektli yan kuikatl in Tesosomoktsin.
    O aik ompoliuis in moteyo,
    ¡nopiltsin, Tesosomoktsin!
    Anka sa ye in mokuik a ika
    niualchoka,
    in san niualiknotlamatiko,
    nontiya.
    En verdad viven,
    allá en donde de algún modo se existe
    ¡ojalá pudiera yo seguir a los principes
    llevarles nuestras flores!
    ¡Si pudiera yo hacer míos
    los hermosos cantos de Tezozomoctzin!
    Jamás perecerá tu renombre
    ¡Oh mi señor, tu Tezozomoctzin!
    Así, echando de menos tus cantos
    me he venido a afligir
    solo he venido a quedar triste
    yo a mí mismo me desgarro
    San niualayokoya, niknotlamati.
    Ayokik, ayok,
    kenmanian,
    titechyaitakiu in tlaltipak,
    ika nontiya.
    He venido a estar triste, me aflijo
    ya no estas aquí, ya no,
    en la region donde de algún modo se existe,
    nos dejate sin provision en la tierra
    por esto, a mí mismo me desgarro.

    Como una pintura nos iremos borrando

    San nikkaki itopyo, ipetlakalo:
    ¡Ah in tepilwan!
    Percibo lo secreto, lo oculto:
    ¡oh vosotros señores!
    Timaseualtin,
    naui, naui,
    in timochi tonyaske,
    timochi tonmikiske in tlatikpak…
    Así somos, somos mortales,
    de cuatro en cuatro nosotros los hombres,
    todos habremos de irnos,
    todos habremos de morir en la tierra…
    Ayak chalchiwitl,
    ayak teokuitlatl mokuepas:
    in tlaltikpak tlatielo.
    Nadie en jade,
    nadie en oro se convertirá:
    en la tierra quedará guardado.
    Timochi tonyaske
    in kanin, ye iukan
    Ayak mokawas,
    san sen tlapopoliuis,
    tiyaui ye iukan ichan.
    Todos nos iremos
    allá, de igual modo.
    Nadie quedará,
    conjuntamente habrá que perecer,
    nosotros iremos así a su casa.
    San iuki tlakuiloli
    ah tonpopoliui.
    San iuki xochitl,
    in san tonkuetlaui
    ya in tlaltikpak.
    Como una pintura,
    nos iremos borrando.
    Como una flor,
    nos iremos secando
    aquí sobre la tierra.
    Ya ketsali ya sakwan.
    xiwkecholi itlakechwan,
    tonpopoliwi,
    tiyawi in ichan.
    Como vestidura de plumaje de ave zacuán,
    de la preciosa ave de cuello de hule,
    nos iremos acabando,
    nos vamos a su casa.
    Oajsiko ye nikan,
    ye ololo a in tlaokol
    ye in itek on nemi…
    Se acercó aquí,
    hace giros la tristeza
    de los que en su interior viven…
    Xik yokoyankan, in antepilwan,
    kuautamoselo,
    ma nel chalchiuitl,
    ma nel teokuitlatl,
    no ye ompa yaske,
    onkan on Ximoua…
    Meditadlo, señores,
    águilas y tigres,
    aunque fuerais de jade,
    aunque fuerais de oro,
    también allá iréis,
    al lugar de los descarnados…
    San tipopoliuiske,
    ayak mokauas.
    Tendremos que desaparecer,
    nadie habrá de quedar.

    Traducciones de Miguel León Portilla

    El célebre Miguel León-Portilla tradujo (con muy exageradas licencias literarias) 20 poemas que le atribuye a Nezahualcoyotl en sus libros sobre poesía náhuatl. A continuación están estos 20 poemas:

    Nahuatl Español

    In chololistli ikuik

    […]

    O nen notlakatl,
    o nen nonkisako
    teotl ichan in tlaltikpak,
    ¡ninotolinia!
    In ma on nel nonkis,
    in ma on nel nontlakat.
    Aj nikitoua yese…
    ¿tlen nais?,
    ¡anonouako tepiluan!,
    ¿at teixo ninemi?,
    ¿ken uel?,
    ¡xon mimati!

    ¿Ye ya noneuas in tlaltikpak?
    ¿Ye ya tle in noluil?,
    san nitoliniya,
    toneua noyollo,
    tinokniu in ayaxkan
    in tlaltikpak, ye nikan.

    ¿Ken in nemoua in tenauak?
    ¿Mach iliuistia,
    nemia teuik, teyakoni?

    ¡Nemi san iuiyan,
    san isemelia!
    In san nonopechteka,
    san nitolotinemi
    in tenauak.
    San ye ika nichoka,
    ¡niknotlamati!,
    no niknokaualok
    in tenauak tlaltikpak.

    ¿Ken kineki noyollo,
    Ipal nemouani?
    ¡Ma ok melel on kisa!
    A iknopillotl ma ok timaliui,
    monauak, titeotl.
    ¿At ya nech mikitlani?

    ¿Asomo ye nelli tipaki,
    ti ya nemi tlaltikpak?
    Aj ka sa tinemi
    iuan ti ual paki in tlaltikpak.
    Aj ka mochi iui titotolinia.
    Aj ka no chichik teopouki
    tenauak ye nikan.

    Ma xi iknotlamati noyollo.
    Maka ok tle xik yokoka.
    Ye nelli in ayaxkan
    niknopiltiua in tlaltikpak.

    Ye nelli kokok ye otimaliuiko,
    in motlok monauak, in Ipal nemoua.
    San nikintemoua,
    nikilnamiki in tokniuan.
    ¿Kuix ok seppa uitse,
    in kuix ok nemikiui?
    San sen ti ya poliuia,
    san sen ye nikan in tlaltikpak.
    ¡Maka kokoya inyollo!,
    itlok inauak in Ipal nemoua.

    Canto de la huida

    de Nezahualcóyotl cuando andaba huyendo del señor de Azcapotzalco

    En vano he nacido,
    en vano he venido a salir
    de la casa del dios a la tierra,
    ¡yo soy menesteroso!
    Ojalá en verdad no hubiera salido,
    que de verdad no hubiera venido a la tierra.
    No lo digo, pero…
    ¿qué es lo que haré?,
    ¡oh príncipes que aquí habéis venido!,
    ¿vivo frente al rostro de la gente?,
    ¿qué podrá ser?,
    ¡reflexiona!

    ¿Habré de erguirme sobre la tierra?
    ¿Cuál es mi destino?,
    yo soy menesteroso,
    mi corazón padece,
    tú eres apenas mi amigo
    en la tierra, aquí.

    ¿Cómo hay que vivir al lado de la gente?
    ¿Obra desconsideradamente,
    vive, el que sostiene y eleva a los hombres?

    ¡Vive en paz,
    pasa la vida en calma!
    Me he doblegado,
    sólo vivo con la cabeza inclinada
    al lado de la gente.
    Por esto me aflijo,
    ¡soy desdichado!,
    he quedado abandonado
    al lado de la gente en la tierra.

    ¿Cómo lo determina tu corazón,
    Dador de la vida?
    ¡Salga ya tu disgusto!
    Extiende tu compasión,
    estoy a tu lado, tú eres dios.
    ¿Acaso quieres darme la muerte?

    ¿Es verdad que nos alegramos,
    que vivimos sobre la tierra?
    No es cierto que vivimos
    y hemos venido a alegrarnos en la tierra.
    Todos así somos menesterosos.
    La amargura predice el destino
    aquí, al lado de la gente.

    Que no se angustie mi corazón.
    No reflexiones ya más.
    Verdaderamente apenas
    de mí mismo tengo compasión en la tierra.

    Ha venido a crecer la amargura,
    junto a ti y a tu lado, Dador de la vida.
    Solamente yo busco,
    recuerdo a nuestros amigos.
    ¿Acaso vendrán una vez más,
    acaso volverán a vivir?
    Sólo una vez perecemos,
    sólo una vez aquí en la tierra.
    ¡Que no sufran sus corazones!,
    junto y al lado del Dador de la vida.

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 21r-22v.)

    Ma san moketsakan

    ¡Ma san moketsakan, nikniuan!
    In iknoke on kate in tepiluan,
    non-Nesaualkoyotsin,
    nikuikanitl,
    tsontekochotsin.
    Xokonkui moxochiu iuan in mekaseuas.
    ¡Ma ika xi mototi!
    San teuan nopiltsin,
    san ye ti Yoyontsin.
    Ma xokonkua in kakauatl,
    in kakauaxochitl,
    ¡ma ya on iua in!
    ¡Ma ya netotilo,
    ma nekuikatilo!
    Aj nikan tochan,
    aj nikan tinemiske,
    tonyas ye iukan.

    Poneos de pie

    ¡Amigos míos, poneos de pie!
    Desamparados están los príncipes,
    yo soy Nezahualcóyotl,
    soy el cantor,
    soy papagayo de gran cabeza.
    Toma ya tus flores y tu abanico.
    ¡Con ellos ponte a bailar!
    Tú eres mi hijo,
    tú eres Yoyontzin.
    Toma ya tu cacao,
    la flor del cacao,
    ¡que sea ya bebida!
    ¡Hágase el baile,
    comience el dialogar de los cantos!
    No es aquí nuestra casa,
    no viviremos aquí,
    tú de igual modo tendrás que marcharte.

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 3v-4r.)

    Xopan kuikatl

    Amoxkalko
    peua kuika,
    yeyekoua,
    kimoyaua xochitl,
    on auia kuikatl.

    Ikauaka kuikatl,
    oyoualli euatiuits,
    san kinankiliya
    toxochayakach.
    Kimoyaua xochitl,
    on auia kuikatl.

    Xochitikpak kuika
    in yektli kokoxki,
    ye kon ya totoma
    aitek.
    San ye konnankilia
    in nepapan kechol
    In yektli kechol
    in uel ya kuika.

    Amoxtlakuilol in moyollo,
    tokuikatikako,
    in tiktsotsona in moueueu,
    in tikuikanitl.
    Xopan kala ijtek,
    in tonteyauiltiya.

    San tik moyaua
    in puyuma xochitli,
    in kakaua xochitli.

    In tikuikanitl.
    Xopan kala ijtek,
    in tonteyauiltiya.

    Canto de primavera

    En la casa de las pinturas
    comienza a cantar,
    ensaya el canto,
    derrama flores,
    alegra el canto.

    Resuena el canto,
    los cascabeles se hacen oír,
    a ellos responden
    nuestras sonajas floridas.
    Derrama flores,
    alegra el canto.

    Sobre las flores canta
    el hermoso faisán,
    su canto despliega
    en el interior de las aguas.
    A él responden
    variados pájaros rojos.
    El hermoso pájaro rojo
    bellamente canta.

    Libro de pinturas es tu corazón,
    has venido a cantar,
    haces resonar tus tambores,
    tú eres el cantor.
    En el interior de la casa de la primavera,
    alegras a las gentes.

    Tú sólo repartes
    flores que embriagan,
    flores preciosas.

    Tú eres el cantor.
    En el interior de la casa de la primavera,
    alegras a las gentes.

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 3v-4r.)

    Xon auiyakan

    Ika xon auiyakan iuinti xochitli,
    tomak mani.
    Ma on te ya akiloto
    xochikoskitl.
    In tokiappankaxochiu,
    tla selia xochitli,
    kueponia xochitli.
    Onkan nemi tototl,
    chachalaka, tlatoua,
    ual on kimati teotl ichan.
    Saniyo in toxochiu
    ika tonauiyakan.
    Saniyo in kuikatl
    ika on pupuliui in amotlaokol.
    In tepiluan ika yeua,
    amelel on kisa.
    Kiyokoya in Ipal nemoua,
    ki ya ual temouiya
    moyokoyatsin,
    in ayajauilo xochitli,
    ika yeua amelel on kisa.

    Alegraos

    Alegraos con las flores que embriagan,
    las que están en nuestras manos.
    Que sean puestos ya
    los collares de flores.
    Nuestras flores del tiempo de lluvia,
    fragantes flores,
    abren ya sus corolas.
    Por allí anda el ave,
    parlotea y canta,
    viene a conocer la casa del dios.
    Sólo con nuestras flores
    nos alegramos.
    Sólo con nuestros cantos
    perece vuestra tristeza.
    Oh señores, con esto,
    vuestro disgusto se disipa.
    Las inventa el Dador de la vida,
    las ha hecho descender
    el inventor de sí mismo,
    flores placenteras,
    con ellas vuestro disgusto se disipa.

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 19r.)

    Ye nonnokuiltonoua

    Ye nonnokuiltonoua,
    on nitepiltsin, Nesaualkoyotl.
    Niknechiko koskatl,
    in ketsalin patlauak,
    ye nonikiximatin chalchiuitl,
    ¡in tepiluan!
    Ixko nontlatlachia,
    nepapan quautlin, oselotl,
    ye nonikiximatin chalchiuitl,
    ya in makistli…

    Soy rico

    Soy rico,
    yo, el señor Nezahualcóyotl.
    Reúno el collar,
    los anchos plumajes de quetzal,
    por experiencia conozco los jades,
    ¡son los príncipes amigos!
    Me fijo en sus rostros,
    por todas partes águilas y tigres,
    por experiencia conozco los jades,
    las ajorcas preciosas…

    (Cantares mexicanos, f. 16v.)

    San yeuan

    San yeuan,
    Ipal nemoua.
    Ninentlamatia,
    ¿ak aso aik ik?
    ¿Ak aso?
    Aik non auiya in tenauakan.

    In san tiktlasotsetseloua,
    in motechpa ye uits in monekuiltonol,
    ¡Ipal nemoua!
    In iskixochitli, kakauaxochitli,
    san nokoneleuiya,
    san ninentlamatia…

    Solamente él

    Solamente él,
    el Dador de la vida.
    Vana sabiduría tenía yo,
    ¿acaso alguien no lo sabía?
    ¿Acaso alguien?
    No tenía yo contento al lado de la gente.

    Realidades preciosas haces llover,
    de ti proviene tu felicidad,
    ¡Dador de la vida!
    Olorosas flores, flores preciosas,
    con ansia yo las deseaba,
    vana sabiduría tenía yo…

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 20r.)

    Nitlayokoya

    Nitlayokoya, niknotlamatiya,
    san, nitepiltsin Nesaualkoyotl.
    Xochitika ye iuan kuikatika
    nikimilnamiki tepiluan,
    ayn oyake, yeua Tesosomoktsin, o yeua Quajquautsin.

    Ok nellin nemoan,
    kenonamikan.
    ¡Maya nikintoka in intepiluan,
    maya nikimonitkili toxochiu!
    ¡Ma ik ytech nonasi,
    yektli yan kuikatl in Tesosomoktsin!
    O ayk ompoliuis in moteyo,
    ¡nopiltsin, Tesosomoktsin!,
    anka sa ye in mokuik a yka
    niualchoka,
    yn san niualiknotlamatiko,
    nontiya.

    San niualayokoya, niknotlamati.
    Ayokik, ayok,
    kenmanian,
    titechyaitakiu in tlaltikpak,
    yka, nontiya.

    Estoy triste

    Estoy triste, me aflijo,
    yo, el señor Nezahualcóyotl.
    Con flores y con cantos
    recuerdo a los príncipes,
    a los que se fueron,
    a Tezozomoctzin, a Quahquauhtzin.

    En verdad viven,
    allá en donde de algún modo se existe.
    ¡Ojalá pudiera yo seguir a los príncipes,
    llevarles nuestras flores!
    ¡Si pudiera yo hacer míos
    los hermosos cantos de Tezozomoctzin!
    Jamás perecerá tu nombre,
    ¡oh mi señor, tú, Tezozomoctzin!,
    así, echando de menos tus cantos,
    me he venido a afligir,
    sólo he venido a quedar triste,
    yo a mí mismo me desgarro.

    He venido a estar triste, me aflijo.
    Ya no estás aquí, ya no,
    en la región donde de algún modo se existe,
    nos dejaste sin provisión en la tierra,
    por esto, a mí mismo me desgarro.

    (Cantares mexicanos, f. 25r y 25v.)

    Nikijtoa

    Nikijtoa ni-Nesaualkoyotl:
    ¿Kuix ok nelli nemoua in tlaltikpak?
    An nochipa tlaltikpak:
    san achika ye nikan.
    Tel ka chalchiuitl no xamani,
    no teokuitlatl in tlapani,
    no ketsalli posteki.
    An nochipa tlaltikpak:
    san achika ye nikan.

    Yo lo pregunto

    Yo, Nezahualcóyotl, lo pregunto:
    ¿Acaso de veras se vive con raíz en la tierra?
    No para siempre en la tierra:
    sólo un poco aquí.
    Aunque sea de jade se quiebra,
    aunque sea de oro se rompe,
    aunque sea plumaje de quetzal se desgarra.
    No para siempre en la tierra:
    sólo un poco aquí.

    (Cantares mexicanos, f. 17r.)

    San nikkaki itopyo…

    San nikkaki itopyo, ipetlakallo:
    ¡Aj in tepiluan!
    Ti maseualtin,
    naui, naui,
    in timochi tonyaske,
    timochi tonmikiske in tlaltikpak…

    Ayak chalchiuitl,
    ayak teokuitlatl mokuepas:
    in tlaltikpak tlatielo.
    Timochi tonyaske
    in kanin, ye iukan.
    Ayak mokauas,
    san sen tlapupuliuis,
    ti yaui ye iukan ichan.

    San iuki tlakuilolli
    aj tonpupuliui.
    San iuki xochitl,
    in san tonkuetlaui
    ya in tlaltikpak.
    Ya ketsalli ya sakuan,
    xiukecholli itlakechuan,
    tonpupuliui,
    tiyaui in ichan.

    Oasiko ye nikan,
    ye ololo a in tlaokol
    ye in ijtek on nemi…
    Xik yokoyankan, in antepiluan,
    kuaut´amoselo,
    ma nel chalchiuitl,
    ma nel teokuitlatl,
    no ye ompa yaske,
    onkan on Ximoua…
    San tipupuliuiske,
    ayak mokauas.

    Percibo lo secreto…

    Percibo lo secreto, lo oculto:
    ¡oh vosotros señores!
    Así somos, somos mortales,
    de cuatro en cuatro nosotros los hombres,
    todos habremos de irnos,
    todos habremos de morir en la tierra…

    Nadie en jade,
    nadie en oro se convertirá:
    en la tierra quedará guardado.
    Todos nos iremos
    allá, de igual modo.
    Nadie quedará,
    conjuntamente habrá que perecer,
    nosotros iremos así a su casa.

    Como una pintura,
    nos iremos borrando.
    Como una flor,
    nos iremos secando
    aquí sobre la tierra.
    Como vestidura de plumaje de ave zacuán,
    de la preciosa ave de cuello de hule,
    nos iremos acabando,
    nos vamos a su casa.

    Se acercó aquí,
    hace giros la tristeza
    de los que en su interior viven…
    Meditadlo, señores,
    águilas y tigres,
    aunque fuerais de jade,
    aunque fuerais de oro,
    también allá iréis,
    al lugar de los descarnados…
    Tendremos que desaparecer,
    nadie habrá de quedar.

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 36r.)

    Niuinti…

    Niuinti, nichoka, niknotlamati,
    nikmati, nikijtoa,
    nikelnamiki:
    maka ik nimiki,
    maka ik nipoliui.
    In kan on aya mikoua,
    in kan on tepetiua,
    in ma ka niau…
    Maka ik nimiki,
    maka ik nipoliui.

    Estoy embriagado…

    Estoy embriagado, lloro, me aflijo,
    pienso, digo,
    en mi interior lo encuentro:
    si yo nunca muriera,
    si nunca desapareciera.
    Allá donde no hay muerte,
    allá donde ella es conquistada,
    que allá vaya yo…
    Si yo nunca muriera,
    si nunca desapareciera.

    (Cantares mexicanos, f. 14v.)

    ¿Kan nelpa tonyaske?

    ¿Kan nelpa tonyaske
    kanon aya mikoua?
    ¿Ika nichoka?
    Moyoliol xi melakuauakan:
    ayak nikan nemis.
    Tel ka tepiluan omikoako,
    netlatilok.
    Moyoliol xi melakuauakan:
    ayak nikan nemis.

    ¿A dónde iremos?

    ¿A dónde iremos
    donde la muerte no existe?
    Mas, ¿por esto viviré llorando?
    Que tu corazón se enderece:
    aquí nadie vivirá para siempre.
    Aun los príncipes a morir vinieron,
    los bultos funerarios se queman.
    Que tu corazón se enderece:
    aquí nadie vivirá para siempre.

    (Cantares mexicanos, f. 70r.)

    Ka tlamati noyollo

    Kin ok ka tlamati noyollo:
    yeua nikkaki in kuikatl,
    nikitta in xochitli:
    ¡Ma ka in kuetlauiya!

    Lo comprende mi corazón

    Por fin lo comprende mi corazón:
    escucho un canto,
    contemplo una flor:
    ¡Ojalá no se marchiten!

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 19v.)

    Aj tlamis noxochiu…

    Aj tlamis noxochiu,
    aj tlamis nokuik.
    In nokonyayeua san nikuikanitl.
    Xexeliui, ya moyaua.
    Kosaua ya xochitl
    san ye on kalakilo
    sakuan kalijtik.

    No acabarán mis flores…

    No acabarán mis flores,
    no cesarán mis cantos.
    Yo cantor los elevo,
    se reparten, se esparcen.
    Aun cuando las flores
    se marchitan y amarillecen,
    serán llevadas allá,
    al interior de la casa
    del ave de plumas de oro.

    (Cantares mexicanos, f. 16v.)

    Xochitika tontlatlakuiloua…

    Xochitika tontlatlakuiloua
    in Ipalnemouani,
    kuikatika tokontlapalaki
    in nenemis tlaltikpak.
    Ik tlatlapana kuauyotl, oseloyotl,
    in motlakuilolpan san ti ya nemi,
    ye nikan tlaltikpak.
    Ik tiktlilania
    kouayotl, ikniuyotl
    aj in tekpillotl.
    Tokontlapalpoua in nenemis tlaltikpak.

    Con flores escribes…

    Con flores escribes, Dador de la vida,
    con cantos das color,
    con cantos sombreas
    a los que han de vivir en la tierra.
    Después destruirás a águilas y tigres,
    sólo en tu libro de pinturas vivimos,
    aquí sobre la tierra.
    Con tinta negra borrarás
    lo que fue la hermandad,
    la comunidad, la nobleza.
    Tú sombreas a los que han de vivir en la tierra.

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 35r.)

    In iluikatl ijtek…

    San ka iluikatl ijtek
    onkan tik yokoya motlajtol.
    ¡Ipalnemouani!
    ¿In tonkonnekis?
    ¿Mach titlatsiuis ye nikan?
    ¿Tik inayas in motenyo in momauiso
    tlaltikpak ye nikan?
    ¿In tonkonnekis?
    Ayak uel ikniu Ipalnemouani…
    Antokniuan an kuaut’amoselo…
    ¿kan nel pa tonyaske?
    In titlakoua ye nikan, antipiluan.
    In ma ok nentlamati,
    tech kokolia, in tech miktiani.
    Xi motlapalokan, moch ompa tonyaske
    in Kenonamikan.

    En el interior del cielo…

    Sólo allá en el interior del cielo
    tú inventas tu palabra,
    ¡Dador de la vida!
    ¿Qué determinarás?
    ¿Tendrás fastidio aquí?
    ¿Ocultarás tu fama y tu gloria en la tierra?
    ¿Qué determinarás?
    Nadie puede ser amigo
    del Dador de la vida…
    Amigos, águilas, tigres,
    ¿a dónde en verdad iremos?
    Mal hacemos las cosas, oh amigo.
    Por ello no así te aflijas,
    eso nos enferma, nos causa la muerte.
    Esforzaos, todos tendremos que ir
    a la región del misterio.

    (Cantares mexicanos, f. 13v.)

    ¿San te, te ye nelli?

    ¿San te, te ye nelli?
    Aka san tlatouanko,
    in Ipalnemouani…
    ¿In kuix nelli?
    ¿Kuix amo nelli?
    Ken in konitoua.
    ¡In ma ok on nentlamati
    in toyollo…!

    Kexkich in ye nelli,
    kiluia in amo nell’on.
    San no moneneki
    in Ipalnemouani.
    ¡Ma ok on nentlamati
    in toyollo…!
    […]

    ¿Eres tú verdadero…?

    ¿Eres tú verdadero (tienes raíz)?
    Sólo quien todas las cosas domina,
    el Dador de la vida…
    ¿Es esto verdad?
    ¿Acaso no lo es, como dicen?
    ¡Que nuestros corazones
    no tengan tormento!

    Todo lo que es verdadero
    (lo que tiene raíz),
    dicen que no es verdadero
    (que no tiene raíz).
    El Dador de la vida
    sólo se muestra arbitrario.
    ¡Que nuestros corazones
    no tengan tormento!
    […]

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 19v-20r.)

    Akan uel…

    Akan uel
    ichan Moyokoyatsin.
    In nouiyan notsalo,
    nouiyan no chialo,
    Yeua temolo in itleyo, in imauisyo, tlaltikpak.
    Kiyokoya,
    Moyokoyatsin: in teotl.
    In nouiyan notsalo,
    nouiyan no chialo,
    yeua temolo in itleyo,
    in imauisyo, tlaltikpak.

    Ayak uel on,
    ayak uel ikniu
    in Ipalnemouani:
    san in notsalo,
    uel itlok, inauak,
    nemoua in tlaltikpak.

    In kinamiki
    in kiuelmati: san in notsalo,
    uel itlok, inauak,
    nemoua in tlaltikpak.

    Ayak nelli
    ye mokniu.
    ¡Ipal nemoua!
    San yu xochitla ipan
    tontemati,
    tlaltikpak,
    monauakan.
    On tlatsiuis in moyollo.
    San kuel achik
    in motlok, in monauak.

    Techyolopoloua in Ipalnemouani,
    tech iuintiya nikan.
    Ayak uel so itlan,
    kisa in, on tlatoua tlaltikpak.

    In san ik tikamana,
    in kenin konitoua toyollo:
    ayak uel so itlan,
    kisa in, on tlatoua tlaltikpak.

    No en parte alguna…

    No en parte alguna puede estar la casa del inventor de sí mismo.
    Dios, el señor nuestro, por todas partes es invocado,
    por todas partes es también venerado.
    Se busca su gloria, su fama en la tierra.
    Él es quien inventa las cosas,
    él es quien se inventa a sí mismo: Dios.
    Por todas partes es invocado,
    por todas partes es también venerado.
    Se busca su gloria, su fama en la tierra.

    Nadie puede aquí,
    nadie puede ser amigo
    del Dador de la vida:
    sólo es invocado,
    a su lado, junto a él,
    se puede vivir en la tierra.

    El que lo encuentra,
    tan sólo sabe bien esto: él es invocado,
    a su lado, junto a él,
    se puede vivir en la tierra.

    Nadie en verdad
    es tu amigo,
    ¡oh Dador de la vida!
    Sólo como si entre las flores
    buscáramos a alguien, así te buscamos,
    nosotros que vivimos en la tierra,
    mientras estamos a tu lado.
    Se hastiará tu corazón.
    Sólo por poco tiempo
    estaremos junto a ti y a tu lado.

    Nos enloquece el Dador de la vida,
    nos embriaga aquí.
    Nadie puede estar acaso a su lado,
    tener éxito, reinar en la tierra.

    Sólo tú alteras las cosas,
    como lo sabe nuestro corazón:
    nadie puede estar acaso a su lado,
    tener éxito, reinar en la tierra.

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 4v-5v.)

    Ikuik in Akoluakan in Nesaualkoyotsin

    ik kitlapaloko in ueue Moteuksomatsin
    ikuak mokokouaya

    Xi nech a ittakan, aya niualasik.
    Ni istak xochin, ni koxkox,
    noketsalekaseuas,
    ni-Nesaualkoyotl.
    Xochitl, tsetseliutikak,
    ompa ye niuits, Akoliuakan.
    In tla xi kakikan niseuas nokuik,
    nik auiltiko Moteuksomatsin.
    ¡Tantalilili, in papapapa, achala, achala!

    ¡Ya ma san tilili
    ya mak san kualkan!

    Xiutlaketsalli ikaka,
    xiutlaketsalli imankan,
    Mexiko,
    in tlilapan,
    a istak uexotl in ye ijkakan,
    onkan mits tlamaseuike in mokoliuan,
    san ye Uitsiliuitl, san ye Akamapich.
    ¡Ika xi choka, in Moteuksoma!
    Ika tokonpia ye ipetl, ikpal.
    Yeuan mits ya iknoittak,
    mits ya iknomatka, Moteuksoma,
    tik ya konpia ye tepetl, ikpal, yeuan.

    In ka, ika xi choka, ya in Moteuksoma.
    Tik ya ittaka atl, on yan tepetl,
    a onkan tik ya ittak in mokokokau,
    ti-Nesaualkoyotl.
    A onkan tlilapan
    a onkan amochko,
    tokon ya chiua in Mexiko.
    Nikan ye ton tlamaseu,
    a onkan tik ya ittak in mokokokau
    ti-Nesaualkoyotl.

    Kuautli in pipitstikak,
    oselotl nanatska,
    Mexiko nikan,
    a onkan tontlatoua Itskouatl.
    A ik tokonpia ye ikpetl ikpalli yeuan.
    Istak uexotl imapan,
    san tontlatoua.
    Akatl istak imanka, tolin istak,
    chalchiuitl imanka,
    Mexiko nikan.

    San ketsal uexotika,
    chalchiutika,
    san ye tokonaltiya in atloyantepetl.
    Ayauitl kan topan mani,
    ma kisa ma yektla xochitl,
    amomak on mani xochimalintok.
    Amokuik, in amotlajtol.
    Moketsalekaseuas tik ejkapeuia,
    in ye tlachia in astatl
    in ye tlachia in ketsalli.
    In ye nemalinalo in tepiluan.

    No ayauitl san topan mani,
    ma kisa ma yektla xochitl,
    mamomak on mani, xochimalintok,
    amokuik, in amotlajtol.
    Tlauilli xochitl in kuepontikak,
    in amoxtli imankan,
    Mexiko nikan.
    San iuiyan tomatimani,
    san ka iamox, in san ka itlakuilol ijtik,
    on mani in atloyantepetl in Tenochtitlan.
    Kisosoua, ye konkuekuepa yeuan,
    on tlachia ye iukan,
    on tlachia yeua iluikaatitik.

    Xiutlaketsalli ya in mochiutikak,
    san iluikaatlaketsalli mochiutikak,
    in yeuatl in teotl a konpachotimani in tlalli
    ma in ik in ye konapaloa Anauatl
    a in iluikaatl.
    Chalchiuxochitl in amomak on mani,
    in ketsaluexotika anka auaxpeuitoke in atloyantepetl,
    semanauak,
    on ma ok semiluitl.
    Iluikaatl ankikuiloua,
    Anauatl in tlalli ankikuiloua,
    tepiluan,
    Ti Nesaualkoyotl,
    ti Moteuksomatsin,
    o amech yokox in Ipalnemouani,
    o amech yokox,
    in tota teotl,
    a iluikaatl ijtik.

    Canto de Nezahualcóyotl de Acolhuacan

    con que saludó a Motecuhzoma el viejo,
    cuando estaba éste enfermo

    Miradme, he llegado.
    Soy blanca flor, soy faisán,
    se yergue mi abanico de plumas finas,
    soy Nezahualcóyotl.
    Las flores se esparcen,
    de allá vengo, de Acolhuacan.
    Escuchadme, elevaré mi canto,
    vengo a alegrar a Motecuhzoma.
    ¡Tantalilili, papapapa, achala, achala!

    ¡Que sea para bien!,
    ¡que sea en buen momento!

    Donde están erguidas las columnas de jade,
    donde están ellas en fila,
    aquí en México,
    donde en las oscuras aguas
    se yerguen los blancos sauces,
    aquí te merecieron tus abuelos,
    aquel Huitzilíhuitl, aquel Acamapichtli.
    ¡Por ellos llora, oh Motecuhzoma!
    Por ellos tú guardas su estera y su solio.
    Él te ha visto con compasión,
    él se ha apiadado de ti, ¡oh Motecuhzoma!
    A tu cargo tienes la ciudad y el solio.

    Un coro responde:
    Por ellos llora, ¡oh Motecuhzoma!
    Estás contemplando el agua y el monte, la ciudad,
    allí ya miras a tu enfermo,
    ¡oh Nezahualcóyotl!
    Allí en las oscuras aguas,
    en medio del musgo acuático,
    haces tu llegada a México.
    Aquí tú haces merecimiento,
    allí ya miras a tu enfermo.
    Tú, Nezahualcóyotl.

    El águila grazna,
    el ocelote ruge,
    aquí es México,
    donde tú gobernabas, Itzcóatl.
    Por él, tienes tú ahora estera y solio.
    Donde hay sauces blancos
    sólo tú reinas.
    Donde hay blancas cañas,
    donde se extiende el agua de jade,
    aquí en México.

    Tú, con sauces preciosos,
    verdes como jade,
    engalanas la ciudad.
    La niebla sobre nosotros se extiende,
    ¡que broten flores preciosas!,
    ¡que permanezcan en vuestras manos!
    Son vuestro canto, vuestra palabra.
    Haces vibrar tu abanico de plumas finas,
    lo contempla la garza
    lo contempla el quetzal.
    ¡Son amigos los príncipes!

    La niebla sobre nosotros se extiende,
    ¡que broten flores preciosas!
    ¡que permanezcan en vuestras manos!
    Son vuestro canto, vuestra palabra.
    Flores luminosas abren sus corolas,
    donde se extiende el musgo acuático,
    aquí en México.
    Sin violencia permanece y prospera
    en medio de sus libros y pinturas,
    existe la ciudad de Tenochtitlan.
    Él la extiende y la hace florecer,
    él tiene aquí fijos sus ojos,
    los tiene fijos en medio del lago.

    Se han levantado columnas de jade,
    de en medio del lago se yerguen las columnas,
    es el Dios que sustenta la tierra
    y lleva sobre sí al Anáhuac
    sobre el agua celeste.
    Flores preciosas hay en vuestras manos,
    con verdes sauces habéis matizado a la ciudad,
    a todo aquello que las aguas rodean,
    y en la plenitud del día.
    Habéis hecho una pintura del agua celeste,
    la tierra del Anáhuac habéis matizado,
    ¡oh vosotros señores!
    A ti, Nezahualcóyotl,
    a ti, Motecuhzoma,
    el Dador de la vida os ha inventado,
    os ha forjado,
    nuestro padre, el Dios,
    en el interior mismo del agua.

    (Cantares mexicanos, ff. 66v-67r.)

    Ni ual asik

    Ni ual asik ye nikan,
    ye ni Yoyontsin.
    San ni xochiyeeleuiya,
    ni xochitlatlapanako tlaltikpak.
    Nokon ya tlapana in kakauaxochitli,
    nokon ya tlapana ikniuxochitli:
    ye teuan monakayo, ti tekpiltsin,
    ni-Nesaualkoyotl, tekuitli Yoyontsin.

    San nikya temouitiuits
    nokuik in yektli,
    iuan nikya temouiya
    titokniuan.
    Kouatiua yeuan:
    ikniutlamachoya.

    Achi niknonauiya,
    achi nikonpaktinemi
    noyolo in tlaltikpak.
    Kin ye ni Yoyontsin nies,
    ni xochiyeeleuiya
    ni xochi kuikui
    in kan tinemiya.

    Nikneneki niseleuiya,
    in ikniuyotl, in tekpilotli,
    in kouayotli,
    ni xochikuikuikatinemi.

    Ka iuki teokuitlatl,
    yuki koskatli,
    in ketsalin patlauak,
    in ipan ye nikmatia
    yektli ya mokuik:
    au ika nonauiya.

    ¿Ak in kanon itotia,
    ueuetitlan,
    xopan kala ijtek?
    In ye ni Yoyontsin,
    ¡ma noyol kimati in!

    He llegado

    He llegado aquí,
    soy Yoyontzin.
    Sólo busco las flores,
    sobre la tierra he venido a cortarlas.
    Aquí corto ya las flores preciosas,
    para mí corto aquellas de la amistad:
    son ellas tu ser, oh príncipe,
    yo soy Nezahualcóyotl, el señor Yoyontzin.

    Ya busco presuroso
    mi canto verdadero,
    y así también busco
    a ti, amigo nuestro.
    Existe la reunión:
    es ejemplo de amistad.

    Por poco tiempo me alegro,
    por breve lapso vive feliz
    mi corazón en la tierra.
    En tanto yo exista, yo, Yoyontzin,
    anhelo las flores,
    una a una las recojo,
    aquí donde vivimos.

    Con ansia yo quiero, anhelo,
    la amistad, la nobleza,
    la comunidad.

    Con cantos floridos yo vivo.
    Como si fuera de oro,
    como un collar fino,
    como ancho plumaje de quetzal,
    así aprecio
    tu canto verdadero:
    con él yo me alegro.

    ¿Quién es el que baila aquí,
    en el lugar de la música,
    en la casa de la primavera?
    Soy yo, Yoyontzin,
    ¡ojalá lo disfrute mi corazón!

    (Romances de los señores de la Nueva España, ff. 3r y v.)

    Makiskueponi

    Makiskueponi
    in moxochiu
    chalchimmimiliui
    xochiisuayo in tomak mani
    ketsalli ye xochitl
    yese tonekimilol
    antepiluan
    san tiktotlaneuiya
    in tlaltikpak.

    Ma iskixochitl
    ma kakauaxochitli
    neneliutimani ye tomak on mani
    ketsalli ye xochitl
    yese tonekimilol
    antepiluan
    san tiktotlaneuiya
    in tlaltikpak.

    San niuallaokoya
    san nitisauasiui
    kan on tiui ye ichan
    o ayok ual olotiua
    sen tiui ok kan on tiui.

    Ma itkiuan ichan
    xochitl, kuikatl
    ma ik ninapantiui
    teokuitlakakaloxochitl
    ketsaliskixochitli
    in tomak on mani
    o ayok ual olotiua
    sen tiui ok kan on tiui.

    Como joyeles se muestran

    Como joyeles se muestran
    tus flores entrelazadas con jades.
    Están ellas en nuestras manos
    preciosas, fragantes flores,
    son nuestro atavío, príncipes
    sólo prestadas
    las tenemos en la tierra.

    Flores preciosas
    cual flores de cacao
    que se entretejan en nuestras manos
    flores maravillosas
    son ellas nuestro atavío
    vosotros, príncipes, prestadas tan solo
    las tenemos en la tierra.

    Sólo me entristezco
    con color de tiza palidezco
    allá en su casa
    de allí no hay regreso
    nadie vuelve de allá
    una sola vez vamos.

    Que pudieran llevar a su casa,
    flores, cantos,
    que madure yo
    con las flores del color
    de las plumas del cuervo
    con flores fragantes
    nadie volverá acá
    de una vez todos nos vamos
    allá vamos, allá vamos.

    (Romances de los señores de la Nueva España, f. 25r.)

  • Etimología de México

    La versión más extendida dice qué México viene de mets- (luna) xik- (ombligo) y -ko (en ~), y por tanto significaría “En el ombligo de la Luna”.

    Sin embargo, no hay manera de confirmar que esa sea la interpretación correcta, ni tampoco parece ser la más plausible. Otras explicaciones dicen:

    “En el ombligo de la Luna” o “en el centro de la Luna”

    metsli: Luna
    xiktli: ombligo
    -ko: en ~

    “En la tierra de Mecihtli (liebre del maguey)”

    Mesihtli: nombre de un caudillo mexica, también conocido como Mexihtli o Mexih, y probablemente una advocación de Huitzilopochtli.
    -ko: en ~

    A su vez, Mecihtli:

    metl: maguey
    cihtli: liebre

    “En el ombligo del maguey”

    metl: maguey
    xiktli: ombligo
    -ko: en ~